The Time to Come Back…

De esto se trata la vida. De las experiencias vividas y las emociones que estas generan. Ver a una de tus bandas favoritas en un escenario que te regresa 20 años en el tiempo.

De esto se trata la vida, de momentos. Tienes 14 años, estás en en una sala de una casa que nunca has ido pero que te parece familiar. Te encuentras a los amigos de la escuela, todos están ahí. A Juan le prestaron auto, no deberíamos pero todos tenemos un vaso rojo con agualoca, hoy tocó jamaica. Tienes 33 años, estás en una sala de una casa que nunca has ido pero que te parece familiar, “Otra vez me siento en los shows que íbamos, lo mismo que decíamos en el camino acá”. Te encuentras a los amigos de las bandas que ya no existen, de las que siguen tocando, las que sacaron disco hace una semana. A Juan le prestaron auto, tenemos una chela en una mano y un mezcal en la otra. Ya tocaron los abridores. “Qué pedo que estos morros suenan igual a las bandas con las que tocábamos?”. “Güey, estos cabrones tocan demasiado amarrado, el baterista no te mames”. “Cantará el Jos o será instrumental como al final?”. “Ya va el Sad”.

De esto se trata la vida. De ver a las bandas y músicos dando el show de sus vidas. Nadie sabe si sera el último, deberían siempre tocar como si lo fuera. De recuerdos, emociones y sentimientos. De re vivir los momentos felices de años atrás. De emocionarte otra vez porque una banda está tocando con esa intensidad y pasión.

Brutal.

“Hacía falta algo así”. Te despides de los amigos, platicas cosas e ideas rápidas. “Ya no hay bandas con guitarras que emocionen así”, “Dime dos bandas que tengan un año de vida, máximo y que te vuelven los sesos”. “No pos sí esta difícil”. “Te escribo en la semana y seguimos con esta plática, ya estoy muy pedo”, “Está bien, ya me voy, estamos re lejos”. En el auto de regreso mientras platicas lo bien que te la pasaste, te pones de acuerdo a que tacos vas a ir, hace hambre y se necesita comer algo antes de dormir. “Vamos al Califa de León, son los únicos que siguen abiertos y están bien cabrones”.

Llegas a tu casa, vives solo, hace 20 años vivías con tu mamá. Hoy nadie te espera para que le digas “Buenas noches”, pero Agnes sí espera que la saques al baño, salió ganona, le tocaron tacos.

Juan se queda en tu casa, te vas al sillón. Él tiene que madrugar para trabajar. Que descanse chido.

De eso se trata la vida. De vivir cosas que te vuelan la cabeza, con gente que te llena el cora.

Las fotos tenían que ser en blanco y negro, tenían que ser con flash y tenían que ser asi, un cagadero. Como antes. Como las fotos que tomaron Glen Friedman y Pat Graham de Fugazi. Fotos que suenan a descague de escenario, a feedback, cuerdas rotas, gritos y sudor. El rollo expirado se coló, fue un regalo del dia y sirvió bien.

“Please Don’t Try To Forget, That’s Why People Take Pictures”.